Sólo en el jardín de su casa lograba la influencia necesaria para
encontrarse con sus sentimientos más profundos. Ahí... en ese instante donde su
mirada se conectaba con las flores, entraban en escena su tristeza, su odio, su
más genuina ira. Qué podía hacer más que contemplar lo que cierta realidad de
su vida, inmodificable, lo llevaba a sentir de esta manera. Estaba atrapado en
un laberinto, sin atajos ni salidas. Todas las mañanas se ponía a prueba frente
su jardín, con la firme ilusión de que algún día ese dolor iba a desvanecerse, pero
siempre sucedía lo mismo, afirmaba que todo seguía igual. Ella nunca volvería,
él insistía en buscarla en cada palabra, en cada gesto... Abatido entonces por
el cansancio de no encontrarla, comprendió que no era a ella a quien quería alcanzar,
sino otro tiempo en el que él había
sido inmensamente feliz. Decidido a continuar junto a ella,
no le quedó más remedio que amarla como es ahora, la misma mujer que hoy
encarna otro personaje.
8 comentarios:
Estimados amigos: aquí me encuentro nuevamente, compartiendo con ustedes mi amor por las palabras, que no podría ser tal, sin el apoyo, motivación y guía permanente de mi querido amigo y profesor Humberto Dib. A él, le estoy profundamente agradecida.
Un gran cariño a todos y muchas gracias.
Eleonora.
Eleonora:
Siempre que leo un cuento tuyo me quedo reflexionando, los seres humanos siempre andamos en busqueda de algo o de alguien? la vida es facíl, difícil o depende de cómo la veamos?
Sigo pensando, gracias.
David
Hola amiga mía. Te daba por desaparecida. Me encanta que tu maestro sea Humberto, lo aprecio mucho. También aprecio lo que has escrito hoy. Muchos caemos atrapados en los laberintos oscuros e irrevocables de la vida...
Un abrazo infinito.
Los seres humanos, utilizamos nuestras propias armas, para defender nuestra parcela sentimental, cuando la realidad no nos interesa la convertimos en nuestra còmplice.
Bienvenida de nuevo y espero que todo te vaya bonito.
un abrazo
fus
PD. sigo aùn de vacaciones pero no podia dejar pasar tu vuelta.
Sólo quiero decirte dos cosas:
1. Que hayas logrado que Fus comentara estando de vacaciones, ya te coloca en un podio que nadie alcanzó.
2. No tenés nada que agradecerme, pero sí seguir escribiendo, pues es lo más importante que debe hacer un escritor.
Sobre el texto, ya conocés mi opinión.
Un beso enorme y bienvenida de vuelta.
HD
Querido Humberto: muchas gracias por tus palabras. Son un motivo más para seguir escribiendo.
Muchos cariños.
Eleonora.
Vine por recomendación de Humberto.
Creo que tienes una forma muy femenina de escribir, me hace recordar autoras de 'otro tiempo' como dices en tu propio texto..
En lo personal me gustan las historias mas actuales, pero estás haciendo un buen camino.
Un abrazo caluroso. Guada.
Guada: muchas gracias por tus palabras. Trabajaré en estilos nuevos.
Cariños.
Eleonora.
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